Si de veras quieres ayudarme:
No camines por mí, déjame caminar por mi camino;
No hables por mi déjame hablar y escúchame;
No llores por mí, déjame llorar y acompáñame;
No decidas por mí, déjame elegir y respeta mis decisiones;
No te arrojes al agua por mí, déjame que aprenda a nadar;
No me impongas tu experiencia, déjame hacer la mía;
No aciertes por mí, déjame aprender equivocándome:
Porque yo crezco más con mis errores que con tus aciertos
René Trossero

lunes, 19 de septiembre de 2011

SUGERENCIAS DE NAVEGACIÓN

Exploren también las entradas del 2010. En algunas, las imágenes tardan en cargar. . Mis recomendadas: Matrimonio gay: ¿estamos preparados los docentes?; Prejuicios, nosotros????? (ojo, es una historieta con ocho cuadros; si no aparecen todos, volver a clickar el título) y Entrevista a Pablo Pineda

No hay comentarios:

Publicar un comentario